Quien busque etiologías de la "crisis" encontrará una descomunal variedad de relatos dispares con todo tipo de especulaciones, inducciones, deducciones y opiniones, por lo general connotadas por un fuerte componente ideológico: hay quien culpa a los banqueros, a la voraz ambición del ciudadano de a pie, al contubernio judeomasónico Illuminati, el ombliguismo de la generación T (los bayboomers ibéricos), el R78, los neoliberales, la sobreproducción, la invención del euro, Alemania, el fin del trabajo, Aznar, la muerte de Dios o la decadencia existencial del hombre occidental. Si buscan doxósofos soltando homilías que pretenden poseer la verdad del origen de la Gran Depresión, los encontrarán de todos los palos y colores.
Ahora bien, si lo que buscan son datos contrastables e infalsables (digamos, ejem, "ciencia") no les queda otra que escuchar a los economistas... que a su vez ofrecen respuestas para todos los gustos, al estar dicha disciplina escindida en multitud de corrientes irreconciliables. Personalmente no me cansaré de defender la teoría de Ricardo Vergès, que a su vez es compatible con las ideas de ese otro titán del periodismo financiero que fue J. Jacks (obligado para todo ciudadano de bien leerse esta magistral entrada suya en Cotizalia). Vergés además de economista es arquitecto, por lo que quizás su discurso sea de fácil comprensión para los tres o cuatro lectores de este blog, y la sencillez y accesibilidad de su oratoria hacen que sea siempre un placer atender a sus reflexiones. Tras un largo lapso sin saber nada de él (por lo visto se ha jubilado), esta semana ha tenido a bien participar en un podcast de Economía Zero, de obligada escucha para todos los interesados en comprender las causas y futuras consecuencias del vendaval de recortes, paro, precariedad, depresión y desconfianza que se ha apoderado del sur de Europa. Pueden escucharlo aquí, y si les convence lo que se comenta les recomiendo continúen investigando por cuenta propia el brillantísimo trabajo de Vergès.
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